¿Cómo mejorar la comunicación en pareja?

¿Cómo mejorar la comunicación en pareja?

La comunicación es la base de cualquier vínculo entre personas. Cuando hablamos un vínculo de pareja, la comunicación efectiva es esencial para crear un vínculo sano y poder vivir una relación funcional y consciente.

¿Qué es la comunicación efectiva?

Es la capacidad de expresar nuestros pensamientos, sentimientos y necesidades de manera clara y respetuosa, y también implica la capacidad de escuchar y comprender los pensamientos, sentimientos y necesidades de nuestra pareja. La comunicación nos permite, entre muchas otras cosas, resolver conflictos de manera constructiva y trabajar en equipo para lograr objetivos comunes.

¿Qué nos impide comunicarnos de forma efectiva?

Uno de los obstáculos que nos encontramos cuando intentamos transmitir un mensaje a otra persona es que muchas veces nos cuesta entender que muchas veces el receptor no interpretará de la misma forma aquello que queremos expresar. De ahí la importancia de que el mensaje transmitido sea claro y asertivo y, por otro lado, que exista una escucha activa, empática, por parte del receptor.

Otros factores que hacen muy difícil la comunicación son las suposiciones, las dudas y las proyecciones. Por eso es imprescindible, en la medida de lo posible, evitar incluir juicios personales y permitir que la otra persona pueda preguntar lo que necesite y estar dispuestos a ofrecer respuestas que eviten malentendidos.

Estrategias para mejorar la comunicación en pareja.

Cread espacios seguros.

No todos los lugares ni todos los momentos son adecuados para tener conversaciones importantes. Hay asuntos que pueden hablarse en un bar o en un banco del parque y otros que serán mucho más fáciles de tratar en la intimidad. Lo mismo sucede con el momento elegido para tener conversaciones incómodas o para poner en cuestión desacuerdos o la continuidad de la relación. A veces, la última hora del día, después de un día de estrés y con cansancio acumulado quizá no es el mejor momento. Podéis pactar conjuntamente cual es el mejor momento para los dos.

Crear un espacio seguro no solamente consiste en encontrar el mejor lugar y momento para hablar, también consiste en convertirnos en un espacio seguro a nivel emocional para nosotros mismos y para nuestra pareja. Tratar de tener razón por encima de todo, señalar, juzgar, interrumpir, elevar el tono de voz, faltar el respeto, o la incapacidad de regulación emocional son los ingredientes perfectos para que cualquier intento de comunicación se convierta en una pesadilla.

Prepara lo que quieres decir.

Parece obvio, pero pocas veces lo hacemos y el resultado es que el mensaje que acabamos transmitiendo no se parece en nada a lo que queríamos decir. Una buena estrategia para solucionar este problema es escribir lo que queremos comunicar. Pruébalo y sorpréndete.

Aprende a escuchar.

Sin escucha activa no hay comunicación efectiva. Escuchar significa convertirse en un lugar donde la otra persona pueda expresarse. Aprende a escuchar más allá de las palabras. Cerca del 90% de la comunicación entre personas es no verbal.

Atrévete a preguntar.

Las dudas crean malentendidos y los malentendidos generan malestar. En un vínculo sano no deberíamos tener miedo de preguntar o aclarar dudas. Es mejor una pregunta incómoda a tiempo que una ruptura, ¿no crees?

Aprende a expresar tus sentimientos y emociones sin señalar a tu pareja.

Cuántas veces una discusión empieza con un “es que tú…”. En lugar de decir “tú me haces sentir así”, prueba a decir “me siento así”, “esta situación me está haciendo sentir…”. El simple hecho de hablar en primera persona evita la desagradable sensación de sentirse señalado por un dedo acusador y ponernos a la defensiva. Las dinámicas de ataque y defensa son patrones de comportamiento que hacen mucho daño a las relaciones.

Si discutís, recordad para qué estáis discutiendo.

Es de vital importancia tener muy claro cuál es el objetivo de hablar con nuestra pareja, de tener conversaciones incómodas o de vivir de vez en cuando alguna discusión. Piénsalo. ¿para qué estás teniendo esa charla con tu pareja? ¿para qué discutís?

A veces, olvidar con qué propósito discutimos con nuestra pareja puede llevarnos directamente a la ruptura de la relación. Cuando una persona es consciente de que lo que quiere es mejorar su relación de pareja, fortalecer la conexión, llegar a un acuerdo, o recuperar conexión su comunicación está alineada con ese propósito y mucho más enfocada a encontrar soluciones que a crear conflictos.

Si lo necesitáis, pedid ayuda.

Cuando la comunicación falla durante demasiado tiempo o en temas importantes para la pareja, es fácil perder la perspectiva y tener una visión clara de la situación. La ayuda externa de un profesional os puede resultar de gran ayuda. Si quieres más información haz click aquí.